El cerebro no envejece como el resto del cuerpo, y todavía se desconocen muchos aspectos de este proceso. Se ha encontrado un nuevo gen asociado al envejecimiento cerebral.
El cerebro no tiene canas, ni arrugas. Su envejecimiento está asociado a una ligera pérdida de peso, un menor número de conexiones entre las neuronas, menor vascularización sanguínea, y un aumento del estrés oxidativo, es decir, de acumulación de “residuos moleculares” procedentes de la alta actividad neuronal.
Sin embargo, el envejecimiento cerebral no es el mismo en todas las personas, ni va siempre acompasado con el envejecimiento del resto del cuerpo. Además, en las enfermedades neurodegenerativas asociadas a la edad, se observa una aceleración del proceso de envejecimiento, como si en esas personas el “reloj biológico de la edad” acelerara su velocidad.
Si bien todavía se desconoce mucho al respecto, ahora un equipo de investigadores de la Universidad de Columbia en Estados Unidos han asociado distintas variantes del gen denominado TMEM106B y de la progranulina, al envejecimiento cerebral acelerado. Algunas variantes de estos genes aumentan el riesgo a padecer enfermedades neurodegenerativas tipo Alzheimer o Parkinson a partir de los 65 años, en comparación con personas que presentan otras variantes de estos genes.
Según la variante genética se puede determinar la edad cerebral
Los científicos participantes en el estudio investigaron la carga genética de 1.904 muestras de autopsias de cerebro humano tanto procedentes de personas sanas como de personas que habían padecido demencias.
Encontraron que en la corteza frontal, una región relacionada con el pensamiento y la memoria, algunas variantes del gen TMEM106B aumentaban el riesgo de envejecimiento acelerado de hasta 12 años más frente a otras variantes que “protegen” al cerebro al envejecer. Estos efectos serían sobre todo relacionados con la inflamación, que está asociada a procesos patológicos. En otras palabras, según el tipo de gen TMEM106B que tengamos, tendremos más o menos capacidad de combatir los factores inflamatorios asociados a la edad.
Calcular la edad real del cerebro según tus genes
Los investigadores opinan que identificando en los individuos las variantes del gen se puede establecer el envejecimiento diferencial (D-aging) de cada individuo, con independencia de su edad biológica. Al parecer, las variantes genéticas están distribuidas de manera distinta en las personas, y ello podría predecir la edad cerebral, según la variante y el número de copias del TMEM106B que cada cerebro tenga.
¿Futuras dianas terapéuticas anti-envejecimiento?
Este estudio muestra una relación de la genética cerebral con la velocidad de envejecimiento muy novedosa. Aunque todavía sea prematuro y sin duda otros genes serán identificados con el progreso de las investigaciones, se podría pensar en el futuro en una terapia genética que tenga como diana estos genes, para evitar o retrasar la edad cerebral y, en consecuencia, las enfermedades neurodegenerativas asociadas al envejecimiento.