El sueño es vital para el funcionamiento de la mente. La investigación reciente demuestra que la memoria se puede potenciar durante el sueño.
Dormir para tener salud mental
En un artículo previo de este blog comenté lo importante que es el sueño para gestionar los recuerdos y la actividad de las neuronas. Inicial dormir es esencial para asegurar el correcto funcionamiento de la mente. Muchas disfunciones relacionadas con la atención, el lenguaje, razonamiento, capacidad de tomar decisiones, aprendizaje y memoria vienen como consecuencia de privarse de dormir. Ello no quiere decir que el sueño aumente nuestra inteligencia, ni las capacidades de la mente.
Sin embargo, existen técnicas innovadoras efectivas para impulsar el conocimiento cuando estamos despiertos como fármacos, estimulación del cerebro y prácticas de meditación. ¿Por qué no buscar otras estrategias para estimular la memoria durante el sueño?
Estimular el conocimiento mientras se duerme
Las nuevas revolucionarias estrategias intentan conseguir impulsar la memoria, e incluso aprender nuevas cosas durante la fase de sueño. Para ello, manipulan electroquímicamente el cerebro para reactivar la memoria, estimulan oscilaciones del cerebro específicas del sueño, y usan sistemas para aumentar la producción de neurotransmisores. Los neurotransmisores son moléculas químicas que las neuronas producen para comunicar entre ellas.
Para ello se proponen dos estrategias:
1) Optimizar el sueño mientras se aprende. Por ejemplo, hacer pequeñas siestas antes de aprender nueva información aumenta la adquisición de nuevos circuitos de memoria. Lo mismo ocurre, cuando se hacen pequeñas siestas para consolidar recuerdos frescos recientemente adquiridos.
2) Más intrigante es que se puede también aumentar la memoria manipulando directamente el cerebro durante el sueño. Para ello se utilizan manipulaciones de sistemas de neurotransmisión o de oscilaciones del cerebro mientras se duerme. Se trataría de un “aprendizaje inducido”.
Inducir nuevos aprendizajes en el sueño por el olfato
Un estudio fascinante fue el desarrollado por investigadores alemanes que demostraron que los recuerdos de localizaciones de objetos se pueden reactivar durante el sueño exponiendo a las personas a olores específicos asociados a esos objetos.
Para ello, los participantes aprendían la ubicación de estos asociados a un olor específico. Posteriormente, los participantes se volvieron a exponer a esos olores durante la fase del sueño de ondas lentas, mientras que otros participantes no se exponían a olores durante sueño. Los resultados demostraron que las personas expuestas a los olores durante el sueño recordaban mejora la ubicación de esos objetos.
El futuro de estas terapias es fascinante y muy prometedor. Ello implicaría que nuestro cerebro estaría a la caza de nuevos aprendizajes incluso mientras dormimos. Como broma, en el futuro quién sabe si en lugar de estar estudiando por la noche en la víspera de un examen, se podría estar durmiendo mientras nuestro cerebro se estimula.